Incineración y reposición de Bandera de la Escuela Preparatoria Nocturna

En el marco de la celebración del 209 aniversario de la Independencia de México, iniciada por Don Miguel Hidalgo en 1810, en ceremonia cívica se realizó la incineración y reposición de Bandera de la Escuela Preparatoria Nocturna de la Universidad Juárez del Estado de Durango, acto realizado el pasado lunes 16 en el monumento erigido en memoria de quien nos dio patria y libertad.

El artículo 54 bis de la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales, establece que “… cuando se requiera destruir alguna réplica de la Bandera Nacional, se hará mediante la incineración, en acto respetuoso y solemne, de conformidad con las especificaciones que el reglamento correspondiente determine”.

Atendiendo dicho ordenamiento, en presencia de autoridades estatales, municipales, militares y educativas, encabezadas por el gobernador José Rosas Aispuro Torres, el protocolo de incineración y reposición de la Bandera lo llevó a cabo el director de la unidad académica, Gerardo Cardoza Cháirez, quien recibió la réplica del lábaro patrio de manos de la abanderada, lo depositó en el pebetero y posteriormente entregó la que será utilizada en toda ceremonia cívica en esa unidad académica.

El acto, que se realizó de manera respetuosa y solemne, contó también con la presencia de profesores y alumnos de la Escuela Preparatoria Nocturna para acompañar a los directivos y la escolta femenil, que orgullosamente y con un uniforme de gala portaban la Bandera que fue incinerada para, posteriormente, recibir una nueva que fue colocada en su sitio de honor.

Cabe resaltar que a la ceremonia acudió el contralor de la UJED, Jesús Espinoza Flores, en representación del rector Rubén Solís Ríos, y estuvo en el presídium apoyando un acto tan significativo como es la reposición del símbolo patrio, que ya era necesaria.

La Escuela Preparatoria Nocturna de la UJED tiene la misión de brindar a sus alumnos una educación de calidad que les permita incorporarse con éxito a los estudios superiores, pueden aprovechar las oportunidades y enfrentar los retos del mundo actual mediante la adquisición de una formación integral que les proporcione una amplia cultura de aprecio por su entorno y la conservación y cuidado de sus valores, así como una mentalidad analítica, dinámica y crítica que les permita ser conscientes de su realidad y la capacidad de aprender a aprender para enfrentar los retos de la vida de manera positiva y responsable, pero también les inculca valores como el respeto y amor por los símbolos patrios como la Bandera o el himno al Alma Mater. Asimismo, propone conductas que promuevan actitudes positivas que den el espacio para responder en forma satisfactoria a las demandas de la sociedad en su conjunto.