Juan Ramón Ramos Quesada, de 73 años, recibe su carta de pasante como contador público de la FECA-UJED

Por: Comunicación Social - 1 de junio, 2025

Juan Ramón Ramos Quesada, de 73 años de edad, ha cumplido su sueño de convertirse en contador público, pues recientemente recibió su carta de pasante de la Facultad de Economía, Contaduría y Administración de la Universidad Juárez del Estado de Durango (FECA-UJED), en la modalidad virtual, como parte de la generación 2020–2024. Siempre perseverante, nunca bajó los brazos para ver cumplido su anhelo, y manifestó sentirse profundamente orgulloso de pertenecer a la familia de la máxima casa de estudios.

Agradecido con la vida, con su familia y con Dios —quienes lo alentaron en todo momento—, expresó: “Decidí continuar con mis estudios porque fue algo que siempre quise hacer. Lo había intentado anteriormente en dos ocasiones, y hoy, gracias a Dios, lo conseguí. Era una ilusión de toda mi vida. Fui funcionario bancario por más de 40 años; la contabilidad es mi vida, es mi pasión, es algo que todos deberíamos tener, cuando menos las bases. Una educación financiera es indispensable; se requiere mucho en la vida diaria todo lo relacionado con la administración y la contabilidad”.

Asimismo, resaltó la calidad educativa de la UJED: “Ser parte de la Universidad es un gran orgullo. Soy universitario. Existen muchas circunstancias por las que los jóvenes desertan o dejan inconclusos sus estudios, pero yo soy el claro ejemplo de que, cuando uno quiere, realmente nada lo detiene. Deben esforzarse y perseguir sus sueños. La modalidad virtual es una excelente opción; la enseñanza es muy buena, al igual que la calidad de los maestros. Exhorto a todas aquellas personas a que estudien en la UJED: es una plataforma muy amigable, con muchas facilidades para realizar las tareas. Estoy muy contento”.

Por último, añadió que los tiempos de Dios son perfectos, ya que logró sobreponerse a problemas de salud, incluidos dos infartos: “Agradezco a Dios y a la UJED por contar con herramientas como la modalidad virtual. Agradezco a mi esposa y a mis hijos, quienes fueron una parte fundamental en este logro. A los jóvenes les digo: nunca dejen sus estudios. Yo continuaré con un posgrado, primeramente Dios”.